COMENTARIO DE LA DIRECTORA

Con FREDA quería mostrar la sociedad haitiana desde una perspectiva femenina, porque esta perspectiva generalmente se pasa por alto. Las mujeres están poco representadas y el análisis de la situación en nuestro país está monopolizado por los hombres. Además, quería servirme de la ficción porque así fue como comencé mi carrera de actriz a los 17 años. Quería retratar personajes femeninos y tratar de entender su complejidad, la complejidad de tomar decisiones humanas, mostrar lo que los hombres y las mujeres de Haití afrontan cada día. Plantear preguntas básicas y concretas como «¿cómo nos las arreglamos día a día y cómo seguimos adelante?”.

Quería evitar manipular la realidad en la medida de lo posible porque mi objetivo es que mi película sea una búsqueda de restitución. Por supuesto, hay cierta forma de subjetividad porque lo hago desde mi punto de vista: escucho, miro, observo y hablo mucho para cuestionarme y asegurarme de que estoy donde debo estar.

Filmamos en exteriores porque, en Haití, no pasamos casi tiempo dentro de nuestras casas porque hace demasiado calor y no hay suficiente espacio. Vivimos en el exterior. Es nuestra cultura. Por eso la cámara está a menudo en el otro lado de la calle cuando filmamos la casa de Jeannette. En nuestro país siempre hay alguien sentado frente a tu casa, observándote. Observamos a nuestros vecinos, somos un poco entrometidos y no hay verdadera intimidad.